El 30 de enero tendrá lugar una Huelga General convocada por la Carta de los Derechos Sociales, que está compuesta por las organizaciones sindicales de nuestro ámbito, así como por múltiples organizaciones sociales (pensionistas, feministas, ecologistas, movimientos juvenil, estudiantes, plataformas contra la exclusión social, la red de economía social y solidaria…)
Con esta huelga nos hacemos eco del llamamiento realizado por el movimiento pensionistas, que tras dos años de continua y fuerte movilización en las calles planteó la necesidad de dar un salto cualitativo, incorporando a otros colectivos a esa justa lucha. Defender el sistema público de pensiones, así como el reconocimiento de un sistema propio de relaciones laborales y protección social, exigiendo la derogación de los recortes de las pensiones aprobados en las reformas de 2011 y 2013, jubilación a los 65 años, una pensión mínima de 1.080 euros o garantizar el poder adquisitivo por ley, es una lucha que atañe tanto a personas que perciben actualmente una pensión como a las futuras pensionistas.
Además, en esta huelga, y en la campaña previa que venimos desarrollando, planteamos la necesidad de tomar medidas que acaben con la precariedad laboral y dignifiquen las condiciones de trabajo. Entre estas medidas se encuentran: dejar sin efecto las últimas reformas laborales, la reducción de la jornada a 35 horas, el establecimiento de un salario mínimo de 1.200 euros, la eliminación de la brecha salarial o la garantía del empleo y de las condiciones laborales en las subcontrataciones, así como otras medidas para hacer frente a la precarización.
También reclamamos el reconocimiento de derechos sociales hoy vulnerados, como el acceso a una vivienda de alquiler social o la garantía de la cobertura de todas las situaciones de dependencia por un sistema de servicios sociales público, universal y gratuito. Poner la vida en el centro exige visibilizar, dignificar y garantizar el trabajo de cuidados.
Creemos que es necesario cambiar este sistema para garantizar una vida digna, para tener un planeta digno. Reconocimiento de la lucha del movimiento ecologista y a los y las jóvenes que trabajan en este ámbito. Proponemos medidas reales para enfrentar la emergencia climática: reducción de emisiones, establecer el límite de las emisiones de carbono… Paralizar los proyectos que impulsan la destrucción del planeta: TAV, incineradora de Zubieta, pozos de gas… Impulsar medidas para un cambio de modelo, ¡no lavado de imagen verde!
La juventud navarra también ha padecido, y sufre todavía hoy, el proceso de precarización de las condiciones laborales, y de la práctica totalidad de los ámbitos de nuestras vidas; una alta tasa de desempleo, contratos temporales, contratos en prácticas, parcialidad, falsos autónomos, una injusta brecha salarial entre hombres y mujeres, dificultades para la emancipación, alquileres para los que se destina una importante parte del sueldo, hemos visto como recortaban y privatizaban la educación pública, así como otras situaciones de precariedad que afectan nuestras vidas y relaciones personales. Sobran razones para la huelga y es urgente que se tomen medidas para hacer frente a esta situación de precariedad.
En ese sentido, el Parlamento Joven de Navarra se adhiere a la Huelga General convocada para el próximo 30 de enero y hace un llamamiento a la juventud navarra a secundar dicha jornada de huelga y participar en las movilizaciones convocadas.